La chica yeyé gana el pasaporte a Estocolmo

Anoche tuvo lugar la esperada paripreselección española, por nombre Objetivo Eurovisión, en la que seis artistas se batieron para tratar de llevarse el favor de ambos jurados y público. Finalmente fue Barei quien consiguió alzarse con la victoria gracias a su grito de guerra 'Say yay!', íntegramente en inglés.


En un alarde de modernidad, apertura y participación ciudadana sin precedentes, TVE nos deleitó anoche con una gala un programa especial de una calidad técnica exquisita, sobre todo en cuanto a lo que el sonido en directo se refiere, algo de lo que en el pasado la televisión pública no podía sacar pecho. Pero "este año sí, este año ganamos fijo", iniciaba su intervención en la rueda de prensa del día después Toñi Prieto, quien ha confirmado que "se trata de un concepto muy cuidado y repensado sobre el que llevamos mucho tiempo trabajando y que demuestra otra forma de hacer las cosas, más rigurosa y profesional". Federico Llano ha añadido poco después que llevaban trabajando en este proyecto "por lo menos desde el puente de la Constitución", mostrando efusivo su alegría desbordada al saber que al menos los coros de nuestra canción en Estocolmo serían en español. "A mediados de enero incluso ya sabíamos cuándo emitir el programa", apostillaba después.

La chica yeyé aún no se cree su suerte

Poco ha tardado la cantautora madrileña en borarrle la sonrisa al jefe de Coproducciones y Eurovisión del ente público, al asegurar a la prensa allí congregada que cantaría íntegramente en inglés su canción 'Say yay!'. La ya oficialmente representante en el concurso europeo ha aprovechado para dar las gracias a todos "incluso al jurado internacional, que no sé cómo pudieron valorar más a Salva", quien fuera su compañero y rival en este camino al triunfo, "a quien quiero y respeto muchísimo. Como persona", ha puntualizado más tarde.

Por su parte, Concha Velasco se ha mostrado muy contenta al ver que su éxito de los 60 'La chica yeyé' cobraba de nuevo vida en la nueva representante española en el certamen europeo, pues así vuelve a tener una excusa para hablar de ella misma y no de sus pérdidas. Así pues, la artista ha señalado que lo más le gusta de Barei es "que tenga mucho ritmo y que cante en inglés", aconsejándole poco después de cara a Estocolmo "que tenga el pelo alborotado y las medias de color".

La crónica de una muerte anunciada la noche, con muchas sorpresas (buenas y malas) para todos los gustos, continúa si hacemos un breve repaso del nivel creativo de las actuaciones y el asombroso poder de adaptación del escenario en cada una de las candidaturas. A destacar también la cuidada realización de planos, para lo cual, según el director del programa, "se ha enviado a un cámara a realizar prácticas durante los ensayos del Melodifestivalen durante cuatro días" aunque, puntualiza, "nos habría gustado que hubieran sido dos, pero no había presupuesto para tanto". Poco después, añadía: "Queríamos contar con una conexión en directo con los jurados internacionales para mostrar aún más la apertura del proceso de este año, pero a Toñi le pareció más bonita la idea de llamar a la embajada sueca en Madrid".

Preguntados por los datos de audiencia de la emisión, ambos directivos se mostraron muy contentos, y añadieron "estamos convencidos que si seguimos así en 2018 podremos alquilar el Palacio de los Deportes de Madrid para hacer allí el programa", continuando con la línea de optimismo y chulería al que ya nos tiene acostumbrados Toñi año tras año. Poco después Fede se ausentó de la rueda de prensa, visiblemente afectado, probablemente por no concebir aún que España vaya a cantar en inglés.